Hay que ser bruto o bruta porque lo bruto es pulsión de infinito.
En latín brutus son los animales lentos, indisciplinados, irracionales y testarudos. Pero también para los romanos Brutus era un apellido con abolengo. Leer ambos usos uno seguido del otro despierta la imagen-relámpago de una animalidad ilustre, esto es, el lugar donde se manifiesta lo que está al mismo tiempo dentro y fuera del orden. Hay que ser bruto o bruta porque los brutos son un poco de todo al mismo tiempo.
Jean Dubuffet lo supo desde siempre. Él iba a buscar el arte allí donde no había señales para su localización. Lo buscaba fuera de los museos, de los salones, de los libros académicos. Lo encontraba en la vida corriente, en las acciones humildes, en las palabras simples y en las frutas crudas.2
Los brutos gritan y no se lavan. Los brutos no votan y no son polite. Los brutos huelen y se soban. Los brutos son tal cual.
La Fragua Bruta entiende la brutalidad como potencia y el arte como gesto de acogida de esa brutalidad. No hay arte allí donde reina el pensamiento racional, calculado y/o logocéntrico. No hay arte allí donde se busca la excelencia y la perfección. No hay arte allí donde no se tambalean los relatos que sostienen una prefiguración del mundo consensuada y nunca puesta en cuestión. No hay arte allí donde no hay incertidumbre, desconocimiento, abismo, vacío. No hay arte allí donde no hay error, duda, incomprensión.
La Fragua Bruta cree que para que haya arte es necesario erosionar todo tipo de actitudes que no abran la puerta a lo bruto, lo impuro, lo maculado, lo marginal, lo frágil, lo mestizo, lo tarado, lo que no va.
La Fragua Bruta apuesta por abandonarse a una atención animal, en-otro-mismada, a través de la cual sea posible ensanchar el mundo conocido. La Fragua Bruta cree que en-otro-mismarse es abrir la puerta al duende o a la gracia. Es encontrar lo divino abrazando la bestialidad.
La Fragua Bruta tiene necesidad de in-competencia, in-completitud, in-formalidad.
La Fragua Bruta quiere caminar lento, detenerse y si se asusta o si se divierte, saltar, correr, volar.
La Fragua Bruta huye de la frivolidad y la indiferencia.
La Fragua Bruta quiere pastar silencio y rebuznar alegría.
La Fragua Bruta no se viste de etiqueta. La Fragua Bruta lleva el pelo suelto amarrado en la coronilla de la calva.
La Fragua Bruta da la mano, abraza, husmea, toca. La Fragua Bruta trabaja con tacto y siente el con-tacto.
La Fragua Bruta es una casa. Es fuego.
La Fragua Bruta observa su animalidad. Admite que es bruta. Confiesa que siente miedo en su intento de abandonarse al infinito.
1 En jerga cinematográfica brutos es el conjunto de material rodado antes de ser editado. Este material no presenta un orden concreto, ni un aspecto pulido.Los brutos contienen errores e imprevistos como huella del directo por lo que es más visible el gesto fílmico.
2 Dubuffet, Jean. Escritos sobre arte. Barral Editores, Barcelona, 1975.